La escritora archipodrida de millones J.K. Rowling (envidia cochina) rebaña aún con trocitos de pan el platazo de comilona que le ha supuesto el personaje de Harry Potter durante todos estos años atrás. Ahora, casi 365 días después de haber culminado la saga literaria con el último libro de este niño (no tan niño ya) mago, ‘Harry Potter y las Reliquias de la Muerte’, vuelve a rescatarlo para escribir con fines benéficos una precuela a la primera novela. Será una historia de 800 palabras, cuyo contenido es ‘top-secret’, que se pondrá a subasta por la casa Sotheby’s en la librería Waterstone’s de Piccaddilly (Londres). El pastonazo que se obtendrá será entregado a English PEN, una organización que apoya la literatura para un mejor entendimiento de las culturas, y Dislexia Action, que ayuda a las personas con problemas de dislexia. Un regalo mágico, sin duda. El director gerente de la citada librería aún está flipando con el ‘detalle’ de Rowling, porque nunca se podría imaginar que la novelista británica pudiera donar algo tan valioso. Me da el palpito que se trata realmente de una operación de acercamiento a los fans para saber cómo aceptarían una nueva franquicia retrospectiva. Habrá que conocer aún por qué camino andará esta precuela, pero creo que tiene poco margen de movimiento (hombre de poca fe, la imaginación mueve montañas); a no ser que se centre en la vida de los padres de Potter hasta que éste cumple un año y ellos mueren, punto de partida de la saga. O a lo mejor, todo la nueva trama transcurra hasta que Harry celebra su undécimo cumpleaños. En cualquier caso, seguro que funciona en ventas literarias ese pequeño relato aunque no sé si daría para una película (se hacen filmes de dos horas casi con folletos) e incluso si tendría éxito como parte de la franquicia cinematográfica que nos ha quedado en herencia. Tiempo al tiempo, porque no creo que sean las únicas 800 palabras que escriba Rowling de los orígenes de Harry Potter.Fuente.
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